En realidad, no se trata de humo sino de vapor de agua. Este vapor proviene del sistema de calefacción de la ciudad y de fugas en las conducciones de agua, que al entrar en contacto con las tuberías de vapor provocan este efecto.

En algunas ocasiones, la fuga de vapor es bastante espectacular. Para proteger a los transeúntes se colocan las famosas y llamativas chimeneas de franjas rojas y blancas que canalizan el vapor.

Pero… ¿para qué se utiliza el vapor?

En las entrañas de la Gran Manzana existe un entramado de tuberías que distribuyen vapor de agua por toda la ciudad.  El vapor se utiliza para la calefacción, para calentar el agua, para la limpieza y desinfección. Al mismo tiempo, la presión del vapor se utiliza para hacer funcionar las máquinas de aire acondicionado de  empresas y comercios.

Este servicio lo provee la empresa Consolidated Edison Inc., compañía de suministros de electricidad, gas y vapor. El agua se calienta a 538°C para convertirla en vapor y es vertida inmediatamente al sistema de vapor de la ciudad, el mayor sistema de calefacción urbana del mundo.

Este sistema no solo se utiliza en edificios residenciales,  edificios como el Cuartel  General de las Naciones Unidas, el Empire State Building, o el Museo Metropolitano de Arte (MET) utilizan vapor para sus sistemas de calefacción y aire acondicionado.

¿Sabías que?

En 2008, la agencia de publicidad Saatchi & Saatchi puso en marcha una curiosa campaña de publicidad utilizando este fenómeno.

Colocaron un soporte sobre las alcantarillas simulando una taza de café y aprovechaban el vapor de agua para anunciar un café recién hecho.

El texto del anuncio dice, “Hey, City that never sleeps, wake up». (Hey, la ciudad que nunca duerme, despierta).

Ingenioso, ¿verdad?