Ocurrió un 22 de diciembre de 1882. Edward Hibberd Johnson, vicepresidente de la Edison Electric Light Company, fue la primera persona en el mundo que adornó su abeto navideño con luces eléctricas. Para ello, utilizó 80 lámparas incandescentes rojas, blancas y azules.
El mismo había diseñado e instalado estas lámparas en su casa de la Quinta Avenida.