Central Park es conocido como el «pulmón verde» de Nueva York. Y lo es. Con sus más de 320 hectáreas de bosques, jardines, y praderas es un oasis de naturaleza rodeado por una jungla de asfalto.
Hoy, vamos a pasear por las tres grandes zonas verdes de esparcimiento que existen en el parque: North Meadow, The Great Lawn y Sheep Meadow. En ellas, neoyorquinos y turistas podemos practicar decenas de deportes, hacer un picnic o, simplemente, tomar el sol.
NORTH MEADOW
Justo al norte de Great Lawn, a la altura de la calle 97, se encuentra el Central Park North Meadow. Un enorme prado de casi 10 hectáreas, que incluye doce canchas deportivas para la práctica de deportes como el fútbol (soccer), fútbol americano, baloncesto, balonmano, o béisbol. Un lugar ideal para familias donde todos los miembros pueden realizar actividades.
En el North Meadow Recreation Center se imparten cursos de fitness para niños y se presta material deportivo.

THE GREAT LAWN
Es la mayor extensión de césped en Central Park. Situada justa en la mitad del parque, es muy fácil ubicarla ya que se encuentra a la altura del Museo de Historia Natural y del MET(entre las calles 79 y la 85).
En un principio, este lugar no estaba previsto en el plan original de Central Park. Estos terrenos estaban ocupados por el embalse de Croton, un enorme depósito de agua construido en 1842. En 1917, las instalaciones se quedaron obsoletas y fue necesaria la construcción de un nuevo depósito. El viejo depósito dejó de prestar servicio en 1931.
Durante la Gran Depresión, la zona se convirtió en el hogar de cientos de personas. Asimismo, pasó a ser un enorme vertedero donde se acumulaba la tierra extraída durante la construcción del Rockefeller Center.
En 1937, tras un intenso debate sobre su futuro (se llegó a barajar la construcción de un gigantesco aparcamiento subterráneo) se decide plantar césped. El tiempo va pasando y la falta de cuidados hace estragos. La zona presenta un aspecto sucio y descuidado. En 1995, gracias a los esfuerzos de la Central Park Conservancy, el Great Lawn recupera todo su esplendor.

Gracias a su tamaño (22 hectáreas) es el lugar donde se llevan a cabo los grandes eventos gratuitos que reúnen a miles de personas. Allí se han celebrado grandes conciertos multitudinarios y tienen lugar los conciertos de verano de la Orquesta Filarmónica de Nueva York.
Por supuesto, The Great Lawn es un sitio ideal para disfrutar de un buen picnic o para tomar el sol. Está abierto al público desde mediados de abril hasta mediados de noviembre.
SHEEP MEADOW

Con una superficie de 6 hectáreas, es uno de los lugares más frecuentados del parque entre los meses de mayo y octubre, época durante la que está abierto al público. Se calcula que en los meses de verano, más de 30.000 personas pasan a diario por este lugar. Es frecuente ver a niños y adultos jugando al frisbee, volando cometas o tomando el sol. Muchos de nosotros hemos extendido una manta sobre su hierba y hecho un picnic.
Sheep Meadow tiene tras de sí una larga y tumultuosa historia:
En un principio, su propósito era servir como «patio de armas» para realizar ejercicios militares. Este curioso uso era de obligado cumplimiento en el concurso de proyectos del que resultaron ganadores Olmsted y Vaux. En 1864, se abandona el uso militar y, dando sentido a su actual nombre, 200 ovejas fueron trasladadas a este lugar. Durante el día pastaban en el prado y durante la noche eran recogidas en un edificio victoriano (reemplazado más tarde por Tavern on the Green) construido en las inmediaciones. En 1934, las ovejas fueron trasladadas a Prospect Park, en Brooklyn.
Durante las décadas de los 60 y 70 del pasado siglo, Sheep Meadow fue testigo de multitud de manifestaciones contra la guerra, conciertos y mítines políticos. Era también un lugar frecuentemente utilizado por la comunidad hippie para llevar a cabo sus famosas «love-ins«.
Fuente: centralpark.com