Una colosal estatua del faraón Amenemhat II, de nueve metros de altura, casi nueve toneladas de peso y cuatro mil años de antigüedad será trasladada desde el Museo Egipcio de Berlín para ser exhibida hasta 2021 en el Museo de Arte Metropolitano (MET) de Nueva York.
La figura expuesta en el Museo Egipcio de Berlín desde 1837, será cedida al MET aprovechando las obras de renovación en el museo alemán. El coloso llegará a Estados Unidos dentro de diez días.
La estatua representa a Amenemhat II, el tercer monarca de la XII dinastía del Imperio Medio (1919-1885 a.C.), vestido con una falda hasta la rodilla y sentado sobre un sencillo trono. Su cabeza aparece cubierta por el tradicional «nemes», adornado con una cabeza de cobra real, asociado el poder de origen divino del faraón.
La estatua será colocada inicialmente en el Gran Salón del Met, y un año después se trasladará al pabellón de arte egipcio del museo neoyorquino, donde permanecerá otros nueve años hasta 2021, fecha en que regresará a Alemania.
La estatua del faraón fue creada a partir de un solo bloque de granito, procedente de una cantera en Asuán, transportado a Menfis para ser esculpida y finalmente erigida dentro de un templo.
Seis siglos después, Ramsés II y su hijo Merneptah inscribieron en ella sus nombres y trasladaron la figura a su capital, Pi-Ramsés, y allí se quedó otros 200 años hasta ser reubicada en la ciudad de Tanis, donde fue desenterrada en el siglo XIX por arqueólogos europeos que vendieron la pieza al Museo Egipcio de Berlín.
Amenemhat II reinó durante la época de mayor esplendor del Imperio Medio del Antiguo Egipto y, gracias al botín recaudado en sus exitosas campañas militares en Siria, se convirtió en mecenas de obras de arte.
Otro motivo para volver a visitar el MET.