A principios de año, la ciudad prohibió la circulación de automóviles por Prospect Park, el mayor parque de Brooklyn.
Ayer, Bill de Blasio, alcalde de la ciudad, anunció la extensión de la prohibición a Central Park a partir del 27 de junio.
Ya en 2015, De Blasio impuso nuevos límites a los vehículos a motor en el parque, impidiéndoles que circularan al norte de la calle 72. Esta medida sirvió para reducir considerablemente el tráfico, que pasó de los 2.500 coches por hora en 1991 a los 850 en la actualidad.
«Este parque no se construyó para los automóviles. Se construyó para la gente», dijo De Blasio, y añadió: «Gente andando, gente en bicicleta (…) De eso va a ir este parque a partir de ahora«.